El vacío y las posibilidades
Para que las cosas sucedan hay que darles espacio. Sin ese espacio, que está vacío, no hay posibilidades. Nos llenamos de mil maneras y nos aferramos a lo viejo para no soltar y experimentar el agujero negro, que es quizás la sensación más cercana a la muerte.
Sin embargo, si nos dejamos estar en ese lugar, despojados de lo superfluo y quebrando los miedos a golpe de corazón palpitante, la magia sucede. Cuando uno esta disponible se empiezan a tejer redes luminosas con los demás seres vivientes. La máscara del ego deja de ser una armadura y se vuelve translúcida. La sensaciones de división y soledad se desvanecen, puesto que el mundo se transforma en un amoroso y bello sostén, como el vientre de la Gran Madre.
Marina Torres Marí
El Bosc Humà
Terapia Gestalt
Acompañamiento educativo
Teatro, cuerpo y escritura
Grupos
Comentarios
Publicar un comentario